Descubre por qué la artroscopia de rodilla es la técnica con mejores resultados

Dr. Ismael Alba

10 septiembre, 2021

Anteriormente, los padecimientos graves en la rodilla tenían soluciones dolorosas, invasivas y con resultados postquirúrgicos poco prometedores. Sin embargo, esto ha cambiado desde el surgimiento de la artroscopia y a continuación te contaremos por qué es la técnica que brinda los mejores resultados.

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¿Qué es la artroscopia de rodilla?

Es una técnica mínimamente invasiva que utiliza una cámara diminuta llamada artroscopio para observar el interior de la rodilla. Este instrumento envía la imagen al monitor de una televisión por lo que ayuda a visualizar las estructuras de la rodilla a detalle para diagnosticar, evitar cirugías abiertas y reducir el tiempo de recuperación del paciente.

¿Para qué padecimientos se indica?

La rodilla es una de las articulaciones que más sufren lesiones, ya que cargan el peso de todo el cuerpo. Las lesiones más frecuentes son en el ligamento cruzado anterior por torsiones, golpes o movimientos repentinos, daños en ligamentos y tensiones, y el desgaste del cartílago.

La artroscopia de rodilla suele realizarse para reparar una lesión de meniscos, retirar tejido dañado, reconstruir los ligamentos afectados por torsiones o roturas, retirar fragmentos sueltos de hueso o cartílago, y para drenar el exceso de líquido sinovial acumulado por la inflamación.

Beneficios de la artroscopia

• Incisiones pequeñas, que pueden ser de menos de cinco milímetros
• Rápida recuperación; el paciente puede reintegrarse a su vida cotidiana en poco tiempo
• Mínimos riesgos de complicaciones o de incapacidad
• Mayor estabilidad en la articulación
• Procedimiento ambulatorio, que no amerita hospitalización
• Se usa anestesia local o epidural, por lo que el paciente no siente dolor durante el procedimiento
• Es un procedimiento que se realiza rápido que dura entre 45 y 60 minutos, dependiendo de la lesión

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¿Cuánto tiempo de recuperación se requiere?

Usualmente, el paciente sale caminando de la intervención, cuidando de no hacer movimientos muy bruscos. El tiempo de convalecencia es de uno a tres días, si se trató de lesiones meniscales, pero las ligamentosas pueden tardar de cuatro a seis días.

Posteriormente se pueden realizar terapias de rehabilitación para recuperar la estabilidad, el movimiento y reincorporarse a la práctica deportiva, lo que toma un periodo estimado de entre cuatro y seis meses. Sin embargo, la atención del ortopedista es indispensable para una recuperación exitosa por lo que debes atenerte a sus recomendaciones, especialmente a la de rehabilitación, que es clave para recuperar el movimiento al 100%.

Si radicas en la Ciudad de México y buscas un ortopedista para tratar ese dolor de rodilla que no te deja dormir, que empeora con el clima lluvioso y frío, y que poco a poco merma tu calidad de vida, te invitamos a contactar al Dr. Ismael Alba, ortopedista cirujano  especializado en el tratamiento de lesiones en rodilla y hombro.

Agenda tu cita a través del formulario de contacto, llámanos al teléfono: 5553535409 o mándanos un correo a: ortopedistamx@gmail.com, con gusto te atenderemos.

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