Luxación de Rótula

La luxación de rótula es un tipo de lesión muy frecuente de la rodilla, no hay que confundir con luxación de rodilla que es aún más grave. Afecta a muchos jóvenes que practican algún deporte que implica movimientos bruscos. La lesión sucede cuando la rótula se desencaja de su sitio y pierde relación con el fémur. Esta lesión puede ser ocasionada por un traumatismo o puede ser espontánea.

Para diagnosticar si existe una luxación lo primero que su doctor le pedirá será una radiografía para comprobar que no haya fractura. Aunque muy probablemente la rótula puede volver a su lugar por sí misma. Sin embargo, es necesario que un médico pueda revisar la lesión. Si la rótula vuelve a su lugar el médico se dará cuenta que existe una luxación explorando la rodilla y pudiendo encontrar sangre y porque la articulación duele.

• Dolor en la rodilla. Este es el principal síntoma, suele ser repentino, de gran magnitud y muy agudo.
• Hematoma. También se puede presentar hematoma en la articulación, en la zona media o un derrame dentro de la articulación.
• Hinchazón. Acompañado de dolor suele hincharse la articulación
• Deformación en la articulación. Aunque puede volver a su estado normal a simple vista se puede observar como la rótula ha cambiado de posición.
• Reducción de la movilidad. Tendrá dificultad para enderezar la rodilla.

Entre las principales causas de una luxación de rótula se encuentran:

• Por traumatismo el cual provoca que esta se desplace de su posición.
• Realizar movimientos repentinos lo que provoca posiciones incorrectas.
• También puede ocurrir debido a que la persona tiene debilidad en el músculo vasto medial.
• Tener la rótula alta también puede ocasionar luxación, esto quiere decir que el tendón rotuliano se introduce en la tibia, provocando un retraso entre la rótula y el fémur. Por lo cual la fuerza ocasionada del cuádriceps provoca que la rótula luxe.
• Tener los pies planos puede desembocar en desalineaciones en nuestro cuerpo por lo que la rótula podría verse desplazada
• Tener un ángulo femoral más grande de lo normal. Un aumento en el ángulo Q, que es el encargado de formar la línea que unen la espina ilíaca con el centro de la rótula, puede provocar que la rótula se salga al extender la extremidad
• Que la posición de las rodillas sea en valgo es decir que una persona tenga las piernas en forma de X puede ocasionar un desplazo de la rótula

El tratamiento dependerá de la causa y de la gravedad con la que se hayan afectado otras partes de la rodilla.  Sin embargo, lo primero que hará el doctor es reducir la luxación haciendo que la rótula vuelva a su ubicación habitual y calmar el dolor e inmovilizar la articulación.

Si no es un caso grave el tratamiento consiste en bloquear la articulación con yeso por lo menos 15 días, y se podrán realizar movimientos simples en las semanas siguientes. Una vez removido el yeso, se suele usar la fisioterapia para reconstruir y reforzar el músculo cuádriceps debilitado por el reposo. En la fase de recuperación también se puede usar electroestimulación   o bien aparatos ortopédicos especializados para la rodilla. En cualquier caso, no podrá volverse a practicar deporte antes durante al menos 8 semanas, un tiempo que podría ampliarse en caso de cirugía.

No siempre será necesario recurrir a una intervención quirúrgica, sólo en caso de que el cartílago sufra alguna microfractura o fractura será necesario llevar a cabo una cirugía para reparar los daños.

Existen varios tipos de procedimientos quirúrgicos para tratar la luxación rotuliana, pero todas tienen como objetivo reducir la tracción de la rótula. La técnica dependerá de las estructuras lesionadas

Prevenir una luxación es difícil y más en personas con cierta predisposición estructural o bien, en deportistas cuyo riesgo siempre puede ser latente. Sin embargo, en deportes donde puede haber cambios bruscos y repentinos hay que tener especial cuidado, es recomendable usar siempre el equipo adecuado. También se puede llevar a cabo un estudio para detectar posibles deformaciones en el pie que pueda provocar una luxación en el futuro.

Pero la mejor manera de prevenir una luxación es a través del ejercicio para así fortalecer la musculatura de la rodilla, sobre todo del cuádriceps y del vasto medial. Entre los ejercicios que puedes hacer para fortalecer las rodillas están:

• Contracción isométrica de cuádriceps
• Elevar una pierna
• Elevar una pierna con rotación externa
• Elevar una pierna en extensión dibujando una T
• Extensión de rodilla formando un ángulo de 90º
• Extensión de rodilla partiendo de 90º con banda elástica
• Sentadillas:
• Sentadilla con apoyo en una pared

El tiempo de rehabilitación dependerá del paciente y de la magnitud de la lesión. Lo primero es controlar la inflamación, el dolor y enrojecimiento mediante reposo, hielo y elevación del pie correspondiente. Así se reduce considerablemente el riego sanguíneo en la zona y esto contribuye a rebajar la hinchazón.

Después se realizan ejercicios isométricos de cuádriceps, esenciales para fortalecer la musculatura del vasto medio. En las últimas semanas de rehabilitación ya se podrán introducir ejercicios moderados progresivamente para ganar estabilidad.